Mi polito no tiene dirección asistida o, lo que es lo mismo, tiene "dirección insistida". Aunque no me impide llevar una vida normal, quieras que no es algo con lo que tengo que cargar día sí y día también. Claro que a mí siempre me gusta ver el lado positivo de las cosas, así que he logrado encontrarle 3 ventajas a esto de tener "dirección insistida":
1. Ayuda a mantener e, incluso, incrementar la masa muscular de lo que son mis bíceps... es más, puedo afirmar que el giro de volante insistido ha pasado a ser el único "deporte" que he practicado en los últimos dos años, lo cual es un poco triste (todo hay que decirlo).
2. Cuando aparco mal (lo cual no es muy extraño en mí) siempre puedo decir "es que, claro, sin dirección asistida... buff!! es duro (nunca mejor dicho)", a lo que mi copiloto siempre contesta "buf! claro tía, ya bastante haces, además, si pasa el camión de la basura no hay fallo". De esta manera, sentimiento de culpabilidad=0.
3. Durante el giro de volante insistido siempre escucho alguna frase mítica desde el "Ay! cariño!" de mi madre al "dalle, dalle!!" de Uxía... frases de ánimo que me hacen saber que, en los momentos difíciles, siempre tengo a alguien ahí para apoyarme.
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