Vale, sí... fuimos de esos afortunados que escuchamos el concierto de Bruce Springsteen sin pagar entrada, peeeeeeeero, no me insultéis todavía!!! porque nosotros nos pusimos fuera del recinto, o sea, al otro lado del foso de agua que hay detrás de las gradas (ver foto superior). Pensamos que quizás desde ahí no se iba a escuchar demasiado bien, pero nada más lejos de la realidad, el sonido era muy bueno... de hecho Bruce nos preguntó en una de sus primeros temas "Can you hear me?" a lo que nosotros respondimos "YES, WE CAN", y porque no preguntó "Can you see me?" porque entonces le hubiéramos respondido "Sometimes yes, sometimes not".... porque había pantallas gigantes, una de ellas enorme (a lo ancho de todo el escenario), pero no siempre mostraban imágenes del escenario. Lo importante es que lo pudimos escuchar bien y pudimos ver cómo el Boss disfruta como un enano en el escenario... y visto lo visto no es de extrañar que tenga tantos fans, porque creo que hasta el momento no he visto un artista que se entregue tanto a su público como él... hasta le dejó a una niña el micrófono para que cantara el estribillo de una canción ("Waiting on a sunny day") y sacó a otra renacuaja a bailar con él sobre el escenario... Y bueno, lo importante, el concierto en sí... la verdad es que no conozco demasiadas canciones de él, pero las que conocía me encantaron, sobretodo "Hungry heart" y "Born to run", y también disfruté con bastantes temas desconcidos para mí o con algunas versiones como "Born to be wild" o "Rocking all over the world".
Conclusión: yo salí encantada porque no soy fan y quedé más que satisfecha, pero compadezco a aquellos fans que habían pagado su entrada y no lo pudieron disfrutar gracias a los paletos que organizaron el concierto.
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